El estudio, que fue cofinanciado por el Ministerio de Educación y la multinacional Nestlé, busca entregar datos inéditos en Chile que promuevan la implementación de estrategias de educación por alternancia en más empresas.
Luego de casi 3 décadas de la implementación de la formación dual en Chile, cerca de 160 liceos técnicos imparten esta estrategia, vinculándose con una amplia variedad de empresas e instituciones que ofrecen espacios para entrenamiento, sin embargo, los tipos de vínculo, convenios y condiciones son muy variadas. En 2019 el Ministerio de Educación encomendó a Chile Dual conocer en qué condiciones se implementa esta alternancia en los colegios, trabajo que continúa hasta la fecha, y que cuenta con amplia información. Sin embargo no tenemos claridad sobre cómo estos proyectos impactan a las empresas y tampoco sabemos qué implica para ellas en materia de relación costo-beneficio.
El entrenamiento que los jóvenes adquieren en estos espacios excede sus capacidades técnicas, generando una maduración y desarrollo de habilidades que son imposibles de conseguir en el aula, a la vez que producen cambios muy positivos también en las empresas e instituciones donde se forman, con ganancias superiores a sus costos de implementación, pero hasta el momento no hay datos duros que respalden esto. En Chile muchas empresas se oponen a ofrecer estos espacios por temor a perder dinero o simple desconocimiento, lo que pone en peligro la expansión de estos programas.
Este estudio busca conocer qué sucede al interior de la empresa para potenciar esta estrategia, y para ello cuenta con el apoyo del Instituto Económico Suizo (KOF), que cuenta con amplia experiencia evaluando la alternancia educativa, y en los últimos años desarrolló un instrumento específico para conducir análisis costo-beneficio del entrenamiento en las empresas. Mediante encuestas a una selección representativa de empresas que tienen experiencia con alternancia en el país, el estudio podrá conocer más detalles sobre esta estrategia, con la intención de promover una modalidad de formación que, hasta el momento, se sustenta en buenas intenciones, pero sobre la cual no existe aún evidencia sólida respecto a sus beneficios.